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Mostrando entradas de septiembre, 2021

YO, QUE FUI TRIBUNO DE LA PLEBE, …

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         Antonio Sánchez Nieto   Lo reconozco: soy hasta cierto punto comunista. Y tengo casi ochenta años. A esta edad me resulta agotador rebatir las estupideces que sobre nosotros se dicen y prefiero acomodarme en el desprecio silencioso. Los imbéciles son innumerables e incansables. Y yo soy vago. Comunista, viejo y vago, son cualidades que repugnan en este bravo nuevo mundo. Pero hoy me esforzaré porque tengo la (mala) conciencia de que, además de los imbéciles, existe una mayoría de malinformados. Y estos merecen respeto porque eludir la ignorancia programada es difícil. A ellos dirijo este breve panfleto explicativo sobre una gran infamia. Educado en el más cutre de los fascismos, descubrí en plena juventud a la diosa Razón e inevitablemente me hice comunista. Desafiando el sentido común vigente en los setenta, me hice sindicalista; de los de tribuna en silla y manifestación en calle: de CC.OO. Un tribuno de la plebe . Habiendo sido actor y testigo de la transición

LA MILONGA DE LA INTELIGENCIA ARTIFICIAL

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  Antonio Mora Plaza   Tal como se presenta esa cosa que se ha llamado en nuestro idioma “inteligencia artificial” [1] a la ciudadanía más parece una religión: por un lado, parecería que sería el bálsamo cervantino de Fierabrás que todo lo cura y, por otro, como la esperanza única para que en el futuro –y incluso en el presente- cura las injusticias y desigualdades brutales de nuestro mundo. En todo caso se ha depositado una muy excesiva esperanza en algo que no queda claro nunca qué es, pero al llamarle “inteligencia” parecería que tendría la capacidad de conocer, preguntarse y de decidir como lo hacen los seres humanos y otros seres vivos que, aunque en menor grado, también muestran signos de inteligencia. El cine y la literatura han contribuido a estas falsas expectativas. Pensemos en el ordenador HAL –letras que preceden al nombre IBM–, que, en la película de Kubrick, 2001, una odisea en el espacio , es capaz de tomar decisiones por su cuenta sin que, aparentemente, haya sido

UN DIÁLOGO INVENTADO

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    Antonio Mora Plaza   Decía mi abuelo Berto que el escritor es como un camaleón: debe camuflarse de cualquiera sin dejar de ser el mismo. Yo me atreví un día a señalarle que eso estaba más cerca de la copia que de la originalidad y él me contestó frunciendo el ceño: “No me has entendido. Si has leído mucho a un autor y sus aledaños no necesitas recordar sus escritos cuando tomas la pluma –el utilizó siempre la pluma para escribir-, sino que debes ponerte en su lugar, saquear su alma, adueñarte de su espíritu, y la escritura fluirá conforme a tus deseos como el agua del río se adapta a su terrenal contorno”. Mi abuelo era muy ampuloso cuando hablaba y gustaba de las metáforas. El día que se lo hice notar me dijo: “la metáfora es la reina de la república de las letras, que además tiene su rey y su príncipe”. Con tono irónico le dije que para ser republicano a machamartillo hablaba con un lenguaje inadecuado y me contestó: “Es otra metáfora cuyo rey es el divino William y su prínc

EL SISTEMA ATUAL DE FIJACIÓN DE PRECIOS DE LA ENERGÍA: UN CASO DE INEFICIENCIA

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  Antonio Mora Plaza   El precio de la luz ha sido noticia estos días por los picos en los precios, llegando a estar a 132,65 euros el megavatio-hora. Además se prevé que pueda alcanzar los 153 euros en esta semana. La cuestión es cómo se ha alcanzado una situación en la que los Gobiernos –el caso es similar en Europa- parecen atados a esta situación. En España la ley que consagra el sistema de fijación de precios actual data de 1997 por obra y gracia del PP y otros partidos de derechas. Básicamente el precio se fija mediante un sistema de subastas donde las empresas oferentes de energía –creadoras como comercializadoras- lanzan sus ofertas según precios de forma marginal, es decir, entrando los diferentes sistemas de producción energética desde los costes más bajos –fotovoltaica y ¿nuclear?- hasta las más caras, como son las derivadas del gas y del carbón. Y aquí viene el problema porque, en el mercado mayorista dominado por 3 grandes empresas desde el lado de la oferta, el precio

AFGANISTAN: LA NECESIDAD DE OTRA VISIÓN DESDE OCCIDENTE.

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  Ramón Utrera Las imágenes dramáticas de masas de personas intentando saltar las vallas del aeropuerto de Kabul en busca de poder aferrarse a la libertad vendidas por los medios de comunicación occidentales han impactado fuertemente durante los últimos días en todo el mundo, especialmente en Occidente.   No es la primera vez que se ven, se vieron en Saigón y en otros lugares en los últimos 50 años. No son falsas realmente, ni son un montaje, aunque buscan más un titular bueno que contar el fondo del problema. Esas personas, esos peligros, esas amenazas existen, no son una invención. La propia izquierda y la progresía occidental están profunda y justificadamente preocupadas por el destino de las mujeres afganas, y de muchas minorías del país. Pero ¿esas imágenes del aeropuerto de Kabul, incluso otras del cruce de fronteras menos impactantes son reflejo real de la situación del Afganistán? Esas imágenes tan estremecedoras son casi todas de varios miles de personas en los alrededores

SIEMPRE FEDERICO

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      Antonio Mora Plaza Traigo a colación este texto que escribí hace 12 años y que me parece tan actual en este agosto del 2021. Dice así:   “Sólo tenía 15 años cuanto te leí entero, o casi. Era una edición de Aguilar. Luego se han recuperado obras tuyas, trozos y textos en prosa. Nada más emocionante que tu lectura, Federico. Quizá más intenso el genial bardo, quizá no tan espontáneo como el inmenso Lope, quizá no tan profundo como el viejo D. Francisco, pero tú siempre tan emocionante. Tu verso anuda la garganta; tu teatro amilana al más templado; tu prosa seduce sin proponérselo. ¡Príncipe de la metáfora, eres único y distinto! Nada ni nadie se parece a ti, ni antes ni después. Otros vuelan más alto en pasiones, como el genial bardo; otros lo han dicho todo lo que un ser humano puede sentir, como el eterno manco, o como el pícaro inglés o el ruso de los sentimientos, pero tu eres la emoción contenida, el sentimiento lacerado, traspasado por la incomprensión, la envidia y l